El mundo de las startups ha conformado un complejo ecosistema en el que la tecnología y la innovación se dan la mano para crear modelos de negocio en ocasiones disruptivos que hacen evolucionar el mercado, aportando nuevas soluciones a las necesidades de los usuarios o, al menos, otras formas de darles satisfacción. Su irrupción en el sector turístico ha sido masiva en los últimos años. Os ofrecemos la primera entrega del estudio pionero en nuestro país realizado por Forum Business Travel, en colaboración con Amadeus España.
Aunque las definiciones pueden ser múltiples y variadas, por lo general, el término startup alude a una empresa con menos de dos años de vida, de base tecnológica o innovadora, con un producto escalable y con un potencial de crecimiento rápido.
Una persona, un equipo o una empresa empiezan con una idea para desarrollar un modelo de negocio o abrir otro segmento de clientela mediante un producto o servicio que puede ser novedoso o disruptivo en el mercado, aunque también se consideran como tales los proyectos que proponen fórmulas y soluciones distintas para las mismas necesidades.
Además de la idea, lo importante para una startup es contar con un equipo equilibrado, de manera que la parte técnica y la comercial tengan un peso bien proporcionado. El buen desarrollo de la solución no es suficiente para llegar al consumidor. Son necesarias estructuras de gestión para encontrar financiación, hacer crecer el proyecto y comercializarlo de forma adecuada. Sigue leyendo